Lucia McEwen es una paisa que por más de 20 años ha estado radicada en la costa, y a lo largo de su vida se ha dedicado a enseñar a los más vulnerables hábitos de lectura, su noble corazón la llevó a conocer nuestra fundación Dones de Misericordia y desde entonces no ha dejado de donar su tiempo para fortalecer la educación de nuestros niños del Kiosko de los Dones en la Isla de Tierra Bomba, a través de los cuentos plasmados en los libros que ella presta para que los más pequeños imaginen la fantasía de estas historias: “Por lo general siempre traemos un cuento, se trabaja en el y después ya se hace una actividad lúdica o una canción para seguir trabajando la literatura”: Lucia McEwen.
Nuestra voluntaria de promoción de lectura, afirma que son más las enseñanzas que ella recibe de los pequeños que las que va a entregar a través de la lectura, así lo afirma: “Siento mucha alegría eso es una de las cosas más bonitas que tenemos siempre acá, que lo reciben a uno con mucho cariño, calor humano, el respaldo de los docentes y demás trabajadores de la fundación me ha parecido espectacular, o sea, muy buen personal, muy capacitados y con muchas ganas de trabajar con los niños, ha sido muy bonita la experiencia”.
Llegar al Kiosko de los Dones fue como encontrar un tesoro lo afirma lucia; porque hay necesidad, pero también mucho potencial y ganas de aprender, la voluntaria resaltó la labor que adelanta la fundación Dones de Misericordia en las jornadas complementarias en las que se les refuerza la educación que los niños reciben en las aulas de clase, la lectura es fundamental para que ellos avancen en su aprendizaje.
“Como es un programa que no es curricular si no que es extracurricular es más para hacerlo lúdico, para hacerlo que sea en juego, dinámico y que a ellos también les quede una enseñanza y uno va detectando que falencias que tienen los niños, por ejemplo, nos hemos dado cuenta que en motricidad algunos están muy atrasados”, y son esas falencias las que a diario se fortalecen en cada clase.
La maestra en lectura trabaja con los pequeños con materiales que son fáciles de conseguir en la isla de Tierra Bomba y que en casa también lo pueden practicar, por ejemplo, las tapas de botellas son de gran utilidad para el desarrollo de alguna tarea de lectura, plasmando lo que leen en dibujos hechos con materiales reciclables.
“los niños tienen deseo de hacer las cosas, ponen atención en las actividades, participan activamente de estas, el avance que se va viendo es excelente, sobre todo cuando uno empieza con la literatura no hay un buen aprestamiento con por esta, uno va viendo avances cuando la atención va siendo mayor, eso es muy bonito y eso si lo ve todo promotor de lectura, ya los niños se concentran más durante el cuento, atienden más a la lectura, y así se va viendo el avance”. Afirma Lucia McEwen promotora de lectura, voluntaria.
Y el resultado se mide al hablar con cada niño; quienes en cortas frases expresan lo que significa la literatura: “La lectura es entendimiento que te abre la mente, si yo leo voy aprender mucho en la vida”, niña beneficiada.
La fundación Dones de Misericordia agradece a cada uno de sus voluntarios que entregan su tiempo y conocimiento para construir juntos un mejor futuro por los niños, que son la promesa de nuestro país, también invita a las personas a donar libros nuevos o usados en buen estado para seguir con esta labor de aprendizaje, nuestras instalaciones están de puertas abiertas para recibirlos.
